Tres residencias de artistas —Marina Planas a Casa Planas (Islas Baleares), Cloé Harent al Festival InCadaqués (Cataluña) y Judith Prat a la Abbadiale por el Instituto Pyréneen de la Photographie (Occitania)— nos invitan a (re)pensar el vínculo entre los Pirineos y el Mediterráneo, examinando la proximidad de las cumbres y el mar en un mismo tiempo.

Se abre así un diálogo entre los elementos crudos, primitivos y telúricos del Cabo de Creus, la temporalidad fijada de los archivos fotográficos de Mallorca y el enfoque a escala humana de la comunidad rural del Valle de Azun.

Esta interpretación actualizada del paisaje acontece una fuente de creatividad y una reminiscencia de valores sensibles, que nos permite reflexionar mejor sobre los retos del presente más allá de las imágenes estereotipadas y comerciales que a menudo nos impiden comprenderlo.